policías
Hay policías y policías. Inclusive, hay también policías. España es una primera potencia
mundial en policías. Policías de todo tipo. Hay policías municipales (que también los llaman policía local y policía urbana); tanto montan.Hay policías autonómicos que se llaman mossos d'esquadra o-y ertzainas.
Hay guardiasciviles que tiene mitad de cuerpo de policía y la otra mitad de militares del ejército. (?)
Y hay policías nacionales que antiguamente se llamaban policía armada. Mucha, mucha policía.
De todos ellos existen unos escuadrones que visten de gala cuando de pegar palos al ciudadano se trata. Y están escogidos, no podría ser de otra forma. No todo el que se mete a policía podría dar palos, patadas y bofetones a un ciudadano que no le da motivos. ¡Y aunque se los diera! Los policías no pueden ser "robocop" que lleven el ministerio de justicia pegadito al extremo de sus eufemísticas "defensas".
Ese tipo de policías son los que disparan la prima de riesgo de una democracia que deja mucho que desear. Están entrenados, adiestrados y fuertemente pertrechados para pegar a los ciudadanos en las calles y dentro de las comisarías. Para humillarle y vejarle en el mejor de los casos. Pero la ideología de esos cuerpos les delata. Con el que se ceban y se deleitan a fondo es con el ciudadano que huele un poquito a rojeras, a izquierdoso.
Pero no nos engañemos. No es cierto que todo lo hacen por obediencia debida a las órdenes que reciben del político que teóricamente los manda. No. Se trata de un organismo autónomo que viene actuando de idéntica manera desde los gloriosos tiempos de la dictadura fascista.
Y lo que pasa es que cuando allá por el año 1977 llegó a España la nosequecracia, no hubo ningún político que tuviera los suficientes ... (esos...) para reciclarlos y prepararlos para actuar dentro de lo que requiere una demosgracias y unos derechos humanos. Y así han seguido con sus métodos de siempre campando a sus anchas.
Hay pronosticadores casi proféticos que aseguran que si alguna vez en España se echara de la policía a esos ejemplares tan ejemplarizantes, que formarían grupos de delincuentes asaltadores de chalés, de naves industriales o-y de bancos, al estilo de los ex-policías que nos han venido de regalo de los descompuestos países de la Europa del Este.
Yo creo que no. Que no se meterían en bandas de ladrones. Yo creo que esos hipotéticos despedidos de la policía, más bien pasarían a formar bandas callejeras de masacrar rojos, inmigrantes, negros, homosexuales, moros y progres de toda calaña.
Cataluña
A mí me educaron en la escuela nacional-católica y me inculcaron la idea de lo que debe ser una España-paña, ¡coño!, por eso no acabo de ver con buenos ojos que ahora Cataluña y
después el País Vasco, se quieran separar del resto de España y nos dejen con tres cuartas de narices a la luna de Valencia. No, eso no lo quiero yo. Llegados a ese punto, si se me permite, lo que yo quisiera es solicitar formalmente que nos independicemos de Cataluña y del País Vasco y que nos anexionemos con Portugal. Eso es lo que yo deseo para que esa Españita resultante de esos dos separamientos, no se quede
en tan poquita cosa.Rajoy
Rubalcaba
No acaba de remontar el vuelo. Ya lo dije en su día a quien me quisiera oír: «No
es acertado elegir para cabeza del PsoE a uno que ha colaborado estrechamente
con el zapaterismo». Y así le va al PsoE. ¿Cuándo caerán en la cuenta? Es muy
necesario que cuanto antes, el PsoE se convierta en PSOE.
11 comentarios :
Ahora mismo estoy viendo las cargas policiales y son demenciales estamos en un país de locos decerebrados y fascistas.
Yo también las estoy viendo, Tracy, las cuales me dan la razón rotundamente de lo que digo en este artículo.
Pues por esa misma razón, María, lo que yo debería contestarte no lo encuentro por ningún lado. Sólo sé decirte que gracias por venir.
Con estas superpotencias mundiales, con estos chicos listos que cargan y descargan palos como quien descarga churros de la churrera, ya que la última opción a que aferrarse (¡Madre del am or hermoso, que dure poco!) es las noticias de la 'tele-menos 1.
Jesús, tu artículo es tan denso, que no me quedan palabras para ponderarlo. ¡Te sigo, te sigo!
¡Viva la mi España con siete puertas y siete llaves!
Abrazos
No María, no te he malentendido. Lo que me ha pasado es que no te he entendido, sencillamente. Pero ahora que pienso..., creo que te leo entre líneas.
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PiliMªPILAR, si a ti te parece denso este artículo, seguro que lo será. De lo que más me preocupo es de que no sea excesivamente largo, excesivamente tedioso de leer.
Abrazos y gracias por venir,
Pues sí, mucha policía y con mucha mala leche, que parece que la hayan mamado de antaño, mucha policía sin plac para que cuando las fotos los revelen parezcan ciudadanos de a pie. Verguenza de gobierno.
Ana, dieciochos los ojos que te ven por aquí.
Yo tengo la tendencia de no culpar excesivamente a los gobiernos. Ya lo desarrollo en el artículo. Más bien creo que el fenómeno se asemeja al del monstruo del doctor Frankestein.
Ese médico de novela, a base de retales de cadáveres, construyó un remedo de ser humano (un humanoide) y le dio vida. Cuando vio su enorme maldad lo quiso destruir pero ya le fue imposible.
Esa es la moraleja que extraigo yo de la famosa novela de Mary Shelley.
De esto se podría encontrar un paralelismo con la creación de unos batallones fascistoides creados y adiestrados para reprimir, torturar, vejar, humillar y contener a la gran inmensa mayoría de la población española.
El PSOE como bien dices tiene que regenerarse, necesitamos caras nuevas, activas, socialistas y republicanas.
Vale, Juan Antonio. Totalmente de acuerdo. Gracias por venir y comentar.
Pues tú tienes tu razón, Marta, y es muy probable que sea más razonable que la mía. (?)
Lo que digo que me ducaron en el nazional-catolicismo y en la España una, grande y libre, es muy verdad. Pero también creo que el buen izquierdista es el que destruye fronteras en vez de construirlas. Por eso lo digo sinceramente lo de anhelar un gran Estado Ibérico con las dos principales naciones, que se llamara, por ejemplo, Portuaña o Espatugal.
Eso es lo que hay.
Besos,
Marta, es muy probable que estés cargada de razón.
Uno de los orígenes del rechazo a catalanes desde otras partes de España, está en la larguísima dictadura franquista, que quiso implantar tanto lo del idioma único, que persiguió en Cataluña a todo el que hablara en catalán.
Yo, para esto de los separatismos españoles, a sea, para analizar si es bueno o malo que se desgaje ésta o aquella parte de España, suelo aplicar "la prueba del 9". Mi prueba del 9 consiste en preguntar a los catalanes que se quieran separar: ¿Qué tal os sentaría —después de conseguida vuestra ansiada segregación—, que os pidieran la independencia los habitantes de Tarragona o los de Lérida —pongo por caso—?
La respuesta que darían en semejante hipótesis, creo que sería muy similar a la que doy yo ante una futura realidad.
Besos,
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